17.8.07

PALABRAS IMPERTINENTES - David Robinson

No toda palabra puede ser dicha
algunas hay que masticarlas
libar su acre sabor y luego tragar.
Las que tienen los bordes afilados
con la lima del rencor
hay que enterrarlas en la arena
hasta que bruñidas aprendan a reír.
Esas que pisan las huellas de la envidia
hay que quebrarles la envidia
hay que quebrarles las piernas
a mazasos de solidaridad.
Aquellas que pintan sus uñas
con el barniz de la indiferencia
hay que bañarlas con el hielo de la soledad.
Las palabras que pretenden la fama
y muerden pechos amigos
hay que amarrarlas
hasta que mueran hambrientas.
Las que enmascaran la ignorancia
hay que estrellarlas
contra el monte de la humildad.
Algunas palabras
no pueden ser dichas
hay que fusilarlas con el silencio.


---
© David Robinson, 2007
Tomado de "Soledades pariendo" (Panamá, 1994)
Puede conocer más del autor [[AQUÍ]].

2 comentarios:

Edilberto González Trejos - Autor dijo...

El reconocimiento de la palabra!
Bravo!

Unknown dijo...

Este escrito de David Robinson es bueno en cuanto al llamado a las relaciones interpersonales. No sólo se refiere a la palabra como uso del escritor; es mayormente al uso humano de ella; con una palabra podemos hacer sonreir o llorar a quien nos escucha.